La primera impresión que tienes cuando entras en la piscina Rockpools del Hotel W Goa es que entras en un mundo de magia: la ubicación, las privilegiadas vistas, el atrevido mobiliario y la espectacular piscina te aportan una increíble sensación de bienestar.
La piscina está construida en hormigón proyectado de forma ovalada con una escalera de obra en un margen. Está revestida interiormente con piezas de 4 cm x 4 cm en color verde oscuro y bordeada con roca artificial en color antracita dentro de un foso de piedra natural que hace que en ella tengas la sensación de sumergirte dentro de un pequeño lago.
He tenido el privilegio de poder bañarme en ella a los diez días de su inauguración y ahora, sentada en el despacho, aún recuerdo la maravillosa sensación que viví.
La otra piscina que posee en hotel se encuentra en la planta baja del edificio central. Es una piscina desbordante más convencional que la anterior, donde prima su funcionalidad. Destacaría el revestimiento interior y las escaleras de acceso a la piscina, muy prácticas y adaptadas para el acceso del usuario.
El hotel tiene una lámina de agua en el centro que da una agradable sensación visual de tranquilidad. Tiene 10 cm de profundidad y está revestida con un revestimiento cerámico en diferentes tonalidades de verdes.
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